En la séptima clase de este curso de PRL, seguimos avanzando en el capítulo tercero de esta ley, “Derechos y obligaciones”, estudiando los artículos 21 y 22.
“Riesgo grave e inminente” da nombre al primero de ellos. Es tal la importancia, que habiendo definido el concepto en el artículo 4 (definiciones), la ley reserva un artículo completo al desarrollo de este concepto. ¿Por qué? Porque como podrás comprobar, implica una serie de obligaciones para el empresario, establecidas en tres ítems diferentes, relacionados fundamentalmente con la información a los trabajadores y la adopción de medidas para hacerle frente.
¿Sabes que un trabajador puede paralizar su actividad si considera que existe un riesgo grave e inminente? Así es, y si el empresario no permite adoptar la medida, serán los representantes legales (RELE) quienes respaldarán la acción.
La Autoridad Laboral cobra una importancia interesante, y el plazo que tienen para tomar decisiones es indudablemente una información objeto de pregunta de examen.
Por otra parte, como podrás estudiar en el artículo 22, “Vigilancia de la salud”, se constituye como un derecho que el empresario debe garantizar. Por norma general, tiene carácter voluntario, pero como casi siempre en estas situaciones, hay excepciones que la ley determina. En este caso son 3 y conocerás el por qué de cada una, así como qué requerimientos precisan cumplir.
A través de un esquema que podrás descargar, identificarás con facilidad qué sujetos y a qué información podrás acceder, teniendo en cuenta que la confidencialidad juega un papel importante y puede resultar algo confuso, pero ordenándolo y analizándolo, te resultará evidente.
Nos vemos en clase.